Ir al gimnasio es señal de... ¿homosexualidad?

15 de febrero de 2018

Ir al gimnasio es señal de... ¿homosexualidad?

Un usuario de Twitter reveló a través de su cuenta una publicación realizada por el periódico malasio Sinar Harian que muestra una lista de ‘señales’ que, según asegura el medio, ‘ayudan’ a detectar a los miembros de la comunidad LGBT. 

En esta lista se pueden ver puntos como un hombre con barbas larga, vestirse con colores ‘femeninos’ como el rosa y el amarillo, comer sanamente y visitar el gimnasio son indicaciones de que un hombre significa ser homosexual. 

"(A los gays) les gusta ir al gimnasio, pero no para hacer ejercicio, sino para mirar a los demás, entre otros signos, señalan la costumbre de vestir ropa de marca y prendas ajustadas”. 

De acuerdo con esta polémica publicación, las señales de homosexualidad tanto en hombres como en mujeres son: tendencia a abrazarse, tomarse de la mano y hablar despectivamente de los hombres en las calles y en las reuniones familiares. 

The Independent informó que esta ‘lista de homosexualidad‘ fue publicada junto con un artículo de una iglesia de Malasia, en el que se discute el problema del aumento de la homosexualidad en el país que creció un 23 por ciento en los último dos años. 

Más del 60 por ciento de la población de Malasia profesa el Islam, una religión que, como otras, considera la homosexualidad como un pecado. En el país asiático existe una ley por la que los gays pueden ser castigados con hasta 20 años de prisión. 

Tras darse a conocer esta publicación, distintos activistas malasios y diversos medios de comunicación criticaron la nota afirmando que es superficial e incitar al odio. 

Arwind Kumar, uno de los YouTubers más famosos de Malasia reprobó esta publicación y le mandó un mensaje a los responsables: 

Conozco a muchos sacerdotes, a muchos ‘ustads’ (estudiosos islámicos), a mucha gente realmente muy religiosa a los que les gusta tener barba. ¿Están tratando de decir que son homosexuales? Así de estúpido suena todo este artículo”. 

 Hasta el momento las autoridades de Malasia no se han pronunciado sobre este tema. 

Nota escrita por

Subiria Duarte

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Enojo e indignación ha ocasionado en redes sociales una publicación hecha en Twitter

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