Le dijeron que su hija estaba secuestrada, pero solo iban a sacarle dinero, en Tizimín

03 de diciembre de 2025

Le dijeron que su hija estaba secuestrada, pero solo iban a sacarle dinero, en Tizimín

De nueva cuenta, la Policía Municipal de Tizimín intervino para evitar que una persona fuera víctima de una extorsión, virtual en la que los delincuentes le exigían depositar dinero para “liberar” a su hija, presuntamente secuestrada.

El señor Margarito Ch. C,, de 65 años, pidió ayuda a la Policía tras recibir llamadas del número 986 198 08 16, para decirle que tenían a su hija secuestrada y que debía acudir a un Oxxo para depositar la cantidad de cinco mil pesos, si no, le harían daño.

El señor de la tercera edad juraba escuchar la voz de una mujer que gritaba, “papá ayúdame”, y al pensar que se trataría de su hija decidió buscar ayuda a las autoridades que lo asesoraron.

Los oficiales abordaron junto con él a una patrulla para trasladarse al centro de trabajo de su hija María Ch. O. Ahí la encontró laborando, sana y salva. Entonces confirmó que se trataba de una extorsión.

La calma volvió y se evitó que depositara su dinero a los delincuentes.

Por ello, la Policía exhorta a no caer en estas llamadas y, en caso de recibirlas, buscar ayuda de manera inmediata, como lo hizo Don Margarito.

La Dirección de Seguridad Pública y Tránsito de Tizimín reconoció y felicitó la rápida y responsable actuación de este padre de familia, quien demostró que la mejor defensa contra la extorsión es la información y la calma.

Los últimos días, varias personas en el oriente del Estado reciben este tipo de llamadas para ser extorsionadas.

Las autoridades exhortan de nuevo a la comunidad a que si no conocen el número del cual les marcan, no contesten, y que si es una llamada que espera, pero no es la persona, no seguir en la línea y colgar.

También es importante denunciar estos hechos al 089 o al 911.

 

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Fidel Dzib

• Don Margarito dio parte a la Policía Municipal cuyos elementos lo acompañaron a donde trabaja la joven, la encontró sana y salva y entonces entendió que era una extorsión.

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