Se quejan vecinos de la Bojórquez de acumulador de basura y terreno baldío

Una casa abandonada que prácticamente es un terreno baldío, donde entran y salen presuntos delincuentes, otra vivienda donde hay basura acumulada y expide un olor a animal muerto, muy cerca de una escuela primaria y la esquina del campo deportivo de la colonia Bojórquez, todo eso se encuentra en la calle 59 H entre 104 y 106, de este rumbo del poniente de Mérida.

Entre el terreno baldío y el otro con basura, se encuentra la vivienda de una familia, donde habitan nueve mujeres. Una de ellas, que no quiso ser identificada, habló de cómo es vivir con esas condiciones.

“De repente apesta, a zorro, gato, no sé qué animal se murió y apesta. Y no podemos ni siquiera abrir nuestra puerta por la peste, y yo se lo dije desde hace tiempo, pero se burlan de mi porque no son parientes directos, pero si hay un parentesco. No soy de pelear, y ni modo, me aguanto”, relata la quejosa.

En la casa abandonada, que parece un terreno baldío, hay vegetación densa, que proyecta ser un rincón de una selva tupida y no el patio de una casa. De acuerdo con la vecina, allí entran personas que circulan por el rumbo, pero que “no tienen buenas prácticas”.

“Se meten hacer sus necesidades, a drogarse. También se traen lo que roban. Le digo que hasta en la casa roban, porque de mi muro han brincado. La otra vez, se estaban llevando mi tanque. Nada nada más porque lo vio una vecina, y la policía se los quitó, y la policía los suelta, porque me dicen que ellos no pueden hacer nada.

Otra de las vecinas del rumbo señala que ese terreno atrae fauna nociva como culebras, ratas y tarántulas, pero a su juicio, de los males, este es el menor.

“La problemática es bastante fuerte para nosotros, pues al tener el lugar al lado de la casa obviamente implica un peligro, independientemente de los animales, de la contaminación, de los mosquitos”, relata.

Afirmó que llevar en tu día a día la problemática es la peligrosidad que, al estar abandonada la casa y no tener puertas, tienen acceso los delincuentes, los indigentes, los drogadictos.

“Ellos vienen y se refugian se refugian. Aquí ya lo saben, aunque no son los dueños y como esa casa ya no tiene puertas. entonces se refugian, se meten a drogarse, a hacer sus necesidades”, comenta la vecina.

Del otro lado, el patio de la otra casa no presenta una vegetación densa, pero allí los árboles fueron reemplazados por basura. Incluso, el terreno expide un olor a animal muerto, razón por la cual, la casa donde habitan las nueve mujeres, incluyendo a adultas mayores y menores de edad, se encuentra acorralada por dos predios con poca salubridad.

“Además -prosigue el relato-, su patio trasero colinda con prácticamente el interior de nuestra casa, porque está en el fondo, hacia el patio de ellos. El muro es muy bajito, brincan. Hemos visto hasta hombres andando desnudos ahí. Tenemos niñas, aquí somos mujeres. Se necesita un poco de sentido común para entender la problemática que, para nosotras, como vecinas y mujeres, implica este peligro”, advierte.

La calle 59 H de la colonia Bojórquez representa una de las esquinas del estadio de béisbol recientemente remozado por el Ayuntamiento de Mérida. Incluso, Notirasa consultó este tema con la Dirección de Gobernación, y la respuesta fue que ya tenían conocimiento del predio en cuestión, y que ya se encuentra en el radar para solventar esta situación.